Siempre me he preguntado por qué el patio del colegio de los Salesianos está siempre lleno de niños. La respuesta, al parecer, está en el ideario del fundador de esta orden, San Juan Bosco, que decía cosas como que "los jóvenes no solo deben ser amados, sino que deben notar que se les ama". Puertas abiertas a la juventud. Este sacerdote italiano promovió el desarrollo de un moderno sistema pedagógico conocido como Sistema Preventivo, así como la construcción de obras educativas al servicio de la juventud más necesitada. En torno a sus enseñanzas, un grupo cada vez más numeroso de hombres y mujeres trabajan a diario por los jóvenes, fundamentalmente los que tienen problemas de exclusión social o provienen de familias desestructuradas. Precisamente ayer comenzaron los actos de celebración del décimo aniversario de la Fundación Proyecto Don Bosco, que ha reunido en una muestra (sala de exposiciones Cajasur en la calle Reyes Católicos) algunos de los mejores momentos de esa década. A la inauguración asistieron, además de voluntarios, amigos y trabajadores de la fundación, la delegada de Justicia en Córdoba, Mercedes Mayo; la delegada de Igualdad y Bienestar Social, Silvia Cañero; la concejala de Servicios Sociales, Ana Moreno; el director de la Fundación Proyecto Don Bosco, Ignacio Vázquez; la directora territorial de la fundación Málaga y Córdoba, Antonia Moriana; o el director de la Obra Salesiana en Córdoba, Andrés González. Las cifras avalan el trabajo de la familia salesiana. Por sus más de ochenta proyectos, entre talleres, encuentros, seminarios y pisos tutelados, han pasado más de 5.000 jóvenes que, gracias a la fundación, han logrado una segunda oportunidad.
La semana de cumpleaños incluye conferencias, un concierto solidario –que tendrá lugar el viernes, en el teatro del colegio–, y una jornada de convivencia con los diferentes grupos de la fundación en Córdoba. Dicha jornada será el sábado en el centro social Don Bosco, en la calle San Francisco de Sales.