Unos cien salesianos cooperadores se han dado cita en la Casa salesiana San Francisco de Sales, de Córdoba, durante el fin de semana del 10 y 11 de mayo. No eran las conocidas fiestas de los patios cordobeses las que los concitaban en la ciudad andaluza, sino la celebración de la Asamblea anual de la Asociación.
El encuentro daba comienzo a media tarde del sábado, con la acogida por parte del Centro local, y la ponencia del salesiano José Luis Aguirre y de Amín El Kharraz, director y mediador intercultural, respectivamente, del Centro Diurno Polivalente de la Fundación Proyecto Don Bosco en Jaén. En ese primer momento, también se hizo presente, por unos breves instantes, el Regional para Europa Oeste, José Miguel Núñez.
La celebración de la Eucaristía, algo más tarde de lo previsto inicialmente, sirvió de marco para la promesa de tres nuevos miembros de la Asociación: el matrimonio formado por Pepe Benavente y Paquita Cuevas, y María Joaquina Martínez Vizcaíno. Compromiso público adquirido en la misa de la vigilia de Pentecostés, fiesta del Apostolado Seglar.
Ya en la mañana del domingo, con incorporaciones y ausencias de unos y de otros, se sucedieron las informaciones, en un tiempo de trabajo común: presentación del futuro directorio provincial, compromiso con la Fundación Proyecto Don Bosco, hermanamiento con Togo… Además, Antonio Herrera, del Centro local de Badajoz, ayudó a los cooperadores a analizar la profundidad espiritual en cada una de las localidades.
El encuentro se cerró con un almuerzo al más puro estilo del “perol” cordobés: salmorejo, una paella enviada desde Carmona y, sobre todo, el tiempo compartido con los hermanos.
