La Catedral de Córdoba ha recibido este sábado la visita de San Juan Bosco, que ha llegado con la compañía de una nutrida y alegre familia: la de los salesianos y la de las muchas personas vinculadas ahora o en el pasado a su colegio. La familia de Don Bosco ha ido con la imagen de su fundador desde la iglesia de María Auxiliadora hasta la Catedral, en una cita que celebra el bicentenario del nacimiento del sacerdote.

Hacia las tres de la tarde se puso en marcha la comitiva, donde figuraban numerosas entidades vinculadas a los salesianos, además de la hermandad del Prendimiento, que reside allí. Iba Don Bosco en el paso en que cada 24 de mayo sale en procesión María Auxiliadora, acompañado por la agrupación musical Cristo de Gracia. A las seis de la tarde tenía que estar en la Catedral, porque a esa hora comenzaba la misa conmemorativa presidida por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández.

El alegre cortejo salesiano partió después Judería arriba y luego buscó de nuevo su barrio de San Lorenzo, para regresar a la iglesia de María Auxiliadora, acompañado siempre por los alumnos, profesores y antiguos estudiantes del centro educativo.