La tierra tembló, y cuando la tierra tiembla… la vida se ve amenazada por la muerte. Esta es la experiencia que hemos vivido recientemente.
En la muerte de nuestro Salvador, según el evangelio de San Mateo, cuando Jesús expiró tembló la tierra y … «se abrieron los sepulcros y muchos resucitaron».
Así, de esta manera tan impactante se proclama la derrota de la muerte y la victoria de la Vida. Con la muerte del Nazareno los muertos resucitan; y quienes nos unimos al Él en esta vida, con un modo de vivir semejante al suyo, también nos uniremos en la victoria sobre la muerte con nuestra resurrección.
Con esta fe hemos experimentado la muerte de nuestro hermano Juan Bosco Rubio Vaquero
¡Feliz Semana Santa! ¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!